Buen aislamiento para reducir el consumo energético

La importancia de un buen aislamiento es vital para reducir el consumo energético de nuestro hogar. Un hecho especialmente relevante ahora que la factura eléctrica está disparada y teniendo en cuenta que la mayor parte de nuestros sistemas de refrigeración o calefacción se alimentan de esta energía.

Por eso, y antes de que se acerque el invierno, te recomendamos que revises tus sistemas de aislamiento. O que, en caso de que carezcas de ellos, te plantees su instalación. Y es que tu bolsillo acabará agradeciéndotelo.

 

La importancia de un buen aislamiento para reducir el consumo energético

Un buen aislamiento en tu hogar puede proporcionarte entre un 30% y un 70%  de ahorro sobre la factura de la luz. Lo que se traduce en muchos miles de euros al final del año. Un dato a tener en cuenta. Un dato especialmente importante si tenemos en cuenta que la luz alcanza unos costes muy elevados desde hace meses.

Pero esta no es la única ventaja de un buen aislamiento térmico, pues conlleva muchas más ventajas para quienes residen en una vivienda. Para que puedas conocer todo lo bueno que conlleva un buen aislamiento, en BOID 24 hemos redactado este artículo con el que queremos ayudarte a decidirte por esta solución tan eficaz como sencilla.

Ventajas de contar con un buen aislamiento en el hogar

Denominamos aislamiento a la acción de sellado de todas las grietas que permitan el intercambio energético entre el interior y el exterior de una vivienda. Este gesto es especialmente importante para favorecer un grado alto de bienestar en la vivienda Y además, es una manera natural y eficiente de controlar la temperatura en nuestra casa.

Aunque muchas veces no le prestamos la atención que debiéramos los aislantes térmicos resulta fundamentales en nuestro día.

Sus principales ventajas son:

  1. Mantienen en calor del interior de nuestra casa. Y es que según sabemos en BOID 24 que somos expertos en el mantenimiento integral de edificios, el 99% del calor de una casa se escapa por un mal sistema de aislamiento en su fachada y de su cubierta. Y es que en muchos casos los sistemas que se instalaron eran insuficientes o defectuosos.
  2. Nos proteger del calor del exterior durante el verano. Y es que facilitan la refrigeración de los elementos estructurales que la componen. Al tiempo que nos ayudan a evitar que se filtre al interior de la vivienda y provoque un efecto invernadero en el interior del edificio.
  3. Nos ayudan a generar un ambiente agradable en el interior de nuestra vivienda durante todo el año. Esto repercute en nuestro humor, nuestra salud e incluso en la manera en que nos relacionamos con las personas con las que vivimos.
  4. Hacen que usemos de manera eficaz los sistemas de refrigeración o calefacción de nuestra casa. Y es que al no haber intercambio nuestros aparatos eléctricos no trabajan de manera forzada ni tan constantemente para mantener la temperatura.
  5. Nos aíslan del ruido que se produzca en el exterior, lo que supone no vivir con sobresaltos o tener que dormir con ruido.

 

Tipos de aislamiento térmico

Hay diferentes sistemas que podemos emplear para aislar térmicamente nuestra casa. Los más frecuentes son los siguientes:

  1. Aislamiento térmico exterior mediante revestimiento de fachada.

Este sistema es válido para todo tipo de viviendas y se puede desarrollar aplicando dos sistemas diferentes: uno es el Sistema de Aislamiento Térmico Exterior (SATE), y otro el que conlleva la instalación de una fachada ventilada. El primero es un revestimiento combinado de un mortero mineral y otro aislante, compuestos por minerales y áridos aislantes. Por su parte, el segundo consiste en la fijación de una estructura metálica en la fachada sobre la que se incorpora un material aislante. Generalmente se trata de lana mineral.

  1. Inyección aislante

En este caso el sistema aislante se basa en la inyección de espuma de poliuretano en las cámaras de aire de las paredes. Esto permite una reducción del ruido exterior además de un aislamiento térmico.

  1. Trasdosado

Se trata de un aislamiento desde el interior. Para ello hay que desarrollar un revestimiento instalado en las paredes de la vivienda. Lo que “forra” la estructura con materiales aislantes, evitando que haya pérdidas de temperatura.

Buen aislamiento para reducir el consumo energético

Así pues, si quieres ahorrar en la factura de la luz y poder controlar la temperatura en el interior de tu vivienda, no lo dudes y revisa el estado en que se encuentran tus sistemas de aislamiento. Y si careces de ellos, no tardes y protege tu vivienda con ellos. ¡Te sorprenderán sus ventajas cuando disfrutes de ellas!