¿Cómo mantener correctamente las bombas de piscina?
Muchas personas que tienen piscina en su vivienda saben que entre las actividades de mantenimiento que deben realizar se encuentra el conjunto de cuidados que requieren las bombas de piscina. Sin embargo, muy pocas saben cómo hacerlo. O, al menos, cómo realizar estas actividades de la manera adecuada. De ahí que algunos de nuestros clientes nos soliciten ayuda en este sentido. De ahí que en Boid 24 hayamos redactado este artículo con el que queremos guiarte respecto a cómo mantener correctamente las bombas de piscina. No pierdas detalle si quieres enterarte de cuanto necesitas realizar en este sentido. Mantener correctamente las bombas de piscina Las bombas que empleamos en las piscinas recreativas de nuestras viviendas son unos dispositivos nos ayudan a que el filtro trabaje correctamente. De ahí que muchos fabricantes de bombas se refieran a ella como el corazón de la instalación hidráulica de las piscinas. La función principal de una bomba de piscina es mover el agua por las tuberías. Un recorrido que comienza en el vaso de la piscina (donde se fuerza al agua a pasar a través del filtro) y que retorna al mismo cuando concluye la circulación del agua. Para conseguir este movimiento del agua, la bomba de la piscina no necesita transmitir al agua una gran presión. Pero sí debe conseguir que recircule una gran cantidad de agua en todo el proceso. De ahí que en el mercado vayamos a encontrar una gran variedad de bombas de filtrado para todo tipo de capacidades de piscina. Y que la elección de la bomba adecuada sea crucial para el correcto funcionamiento de su sistema de filtración. Lo que supone disponer de una bomba adecuada para poder disfrutar de un agua limpia y con un mantenimiento correcto. Tips para el mantenimiento de la bomba de una piscina Para mantener correctamente la bomba de una piscina hay que tener en cuenta las siguientes acciones y necesidades: Enfriamiento. Debemos asegurarnos de que el aire circula alrededor del motor. No deben acumularse desechos alrededor de las rejillas de ventilación del motor. Para evitarlo, limpia las entradas de aire según sea necesario, asegurándote de que la alimentación está apagada. En caso de que emplees una cubierta externa del motor, cerciórate de que no pasa la humedad. Y que existe suficiente espacio entre el motor y la cubierta para que circule el aire. Humedad. La bomba de una piscina no debe mojarse nunca. Protégela de las lluvias y del viento, sobre todo cuando se encuentra en casetillas exteriores. Estacionalidad. Cuando el motor se apague durante períodos prolongados, asegúrate de que las superficies, ventilaciones e interiores estén secos. Así evitaremos la oxidación. Si el motor está al aire libre, cúbrelo para evitar hojas, la suciedad o nieve obstruyan las entradas. Al reiniciar la bomba, comprueba que la succión esté inundada para que el sello de la bomba esté húmedo. De lo contrario, podríamos dañarlo. Limpieza. Para la parte exterior basta con que uses un paño húmedo. También debes evitar barrer cerca de la bomba cuando se encuentra en funcionamiento, pues puedes conseguir que acceda a su interior suciedad. Lubricación. Los rodamientos tienen doble sellado y están lubricados siempre. Si los cojinetes fallan, hay que cambiarlos. Si los cojinetes no se cambian de inmediato, el motor puede sobrecalentarse y hará que otras piezas fallen. Químicos. No almacenes o uses productos químicos cerca del motor. En cualquier caso, si necesitas ayuda para realizar el mantenimiento de la bomba de tu piscina no lo dudes y ponte en contacto con nosotros. En Boid 24 estaremos encantados de ayudarte.
Refuerzo estructural: solución para patologías estructurales de los edificios
Las patologías estructurales de los edificios son problemas graves que ponen en riesgo, no solo la integridad del mismo, sino la vida de quienes habitan en su interior; de ahí que sea necesario acometer remedios y sus soluciones sean más necesarias que nunca. En BOID 24 somos especialistas en este tipo de intervenciones. De ahí que estemos capacitados, no sólo a realizar este tipo de intervención, sino a aplicar soluciones diferentes atendiendo a las necesidades de cada caso. Para que sepas cómo trabajamos las distintas patologías estructurales y las distintas soluciones que aplicamos en cada caso hemos redactado este artículo. ¿Qué son las patologías estructurales? Hay ocasiones en las que los edificios presentan problemas graves de construcción. Estos contratiempos, los denominamos patologías estructurales aunque popularmente se conocen con la expresión “edificio enfermo”. Sus causas son de diferente naturaleza y gravedad; pero siempre requieren una intervención especializada que corrija las alteraciones aparecidas. Algunas de ellas son leves como pequeños desprendimientos en la fachada o en elementos ornamentales. Suelen estar provocadas por la lluvia, las fuertes nevadas, el viento… Es decir, tienen un factor meteorológico. En estos casos, los daños no suelen afectar a la estructura del edificio, aunque requieren intervención experta ya que conllevan la aparición de grietas, fisuras, desprendimientos, mal de la piedra, etc. En este artículo nos vamos a centrar, sin embargo, en las patologías estructurales graves. Es decir, aquellas que requieren una intervención en el fundamento del edificio. Pues es a esta parte del mismo al que afectan. Tipos de patologías estructurales graves de los edificios Las patologías estructurales graves de un edificio son aquellas que afectan a las vigas y forjados del mismo. Estas pueden estar provocadas por problemas como los siguientes: Problemas en el hormigón con problemas de aluminosis. En este caso, el hormigón que se ha empleado para las vigas del edificio va perdiendo propiedades, por lo que hay riesgo de hundimiento. Es habitual en edificios que se construyeron entre los años 1959 y 1970 dada la baja calidad de los materiales que se emplearon en ese momento. Y la dejadez de las autoridades en el control de los mismos. Problemas en las viguetas de hormigón que tienen problemas de carbonatación. Este caso aparece cuando el dióxido de carbono de la atmósfera entra en el hormigón a través de los poros que tiene y, junto con alguna molécula de agua genera una reacción química que causa la carbonatación de los hidróxidos. Esto hace que el hormigón pierda su protección frente a la corrosión. Y que, con el paso del tiempo, la corrosión dañe el hormigón y merme la capacidad de los elementos estructurales que se encuentren afectados. Daños producidos por termitas y carcoma. Aparece en vigas de madera y suele provocar problemas que son visibles porque la viga se comba. Lo que supone que pierde su capacidad para acometer su trabajo. Problemas en las viguetas de hormigón donde hay oxidación de la armadura. Suele aparecer cuando en los techos o cubiertas hay problemas de permeabilización. En estos casos, la armadura del edificio se oxida y, como consecuencia, aumenta de volumen. Lo que acaba por romper la “zapatilla” de la vigueta. En todos los casos es necesaria una intervención urgente y contundente. Trabajos que solucionen los daños y protejan a las personas que residen en su interior. Soluciones para problemas de los edificios Hay muchas y diferentes soluciones para las distintas patologías que puedan presentar los edificios. Las más corrientes son las siguientes: Para problemas de aluminosis, lo mejor es realizar una sustitución funcional de las antiguas viguetas. Se deja a un lado, por tanto, el antiguo forjado y se pone uno nuevo. Para problemas de carbonatación se emplea un sistema de refuerzo de acero galvanizado que sustituye a las viguetas afectadas, consiguiendo su rehabilitación de manera rápida y sencilla. Para daños derivados de termitas y carcoma, se realiza un sistema de refuerzo preflechado. Cuando encontramos problemas de oxidación la mejor solución es la instalación de un sistema de forjado de acero galvanizado de rápida instalación y casi sin obra. Da igual la altura que tenga el edificio, se adaptan sin problemas. Así pues, si tu edificio presenta algún problema de este tipo –o consideras que pudiera tenerlo- no lo dudes y ponte en contacto con Boid 24. Y es que estas patologías estructurales de los edificios son más frecuentes de lo que pensamos. Y requieren soluciones rápidas y duraderas. Trabajos como los que realizamos en nuestra empresa desde hace muchas décadas.
PROYECTO: “DESARROLLO A MEDIDA DE MODIFICACIONES DE PLATAFORMA TECNOLOGICA DE LA MOVILIZACION DEL SERVICIO DE ASISTENCIA TECNICA PARA SU FRANQUICIAMIENTO”
BOID 24 MANTENIMIENTO, S.L.,ha sido beneficiaria de apoyo por parte del IVACE en el proyecto “DESARROLLO A MEDIDA DE MODIFICACIONES DE PLATAFORMA TECNOLOGICA DE LA MOVILIZACION DEL SERVICIO ASISTENCIA TECNICA PARA SU FRANQUICIAMIENTO, S.L.”, perteneciente al programa PROYECTO DE DIGITALIZACION DE PYME (DIGITALIZA-CV) con cargo al presupuesto 2020. BOID 24 pretendía dar un salto tecnológico cualitativo en la plataforma que disponía de forma que se pudiera franquiciar el servicio de movilidad y asistencia técnica. El sistema del que se ha partido permitía la escalabilidad de la solución para tantos clientes, técnicos y personal de callcenter como se requiriese, pero se precisaban efectuar una serie de desarrollos a medida que lo posibilitasen. Este proyecto con número de expedienteIMDIGA/2020/265 ha sido cofinanciado en un 50% por la Unión Europea, dentro del Programa Operativo FEDER de laComunitat Valenciana 2014-2020.
Descalcificador por ósmosis: Agua de calidad en casa
La calidad del agua que llega a nuestras casas no es siempre la que deseamos. Esto es importante, ya que no se trata de que nos guste o no el sabor –que es un tema importante para muchas personas- si no que puede afectar a nuestra salud de manera importante si esa agua que nos llega tiene muchos residuos. Y es que estas impurezas pueden acumularse en nuestros órganos y dar lugar a diferentes patologías. Especialmente de aquellas que están vinculadas al riñón que es muy sensible a todas ellas. Especialmente al calcio, una sustancia que suele estar presente en el agua de casi todas nuestras ciudades. Esas aguas son las que se conocen como aguas duras. Para evitar estas situaciones, muchas personas –no solamente las más mayores- únicamente emplean el agua corriente para lavar o para su higiene personal, mientras que para su consumo optan por adquirir botellas de agua en comercios. Un gasto económico importante y un gesto con el que no conseguimos que nuestro hogar sea sostenible ya que no contribuimos a que se disminuya la emisión de residuos de plástico. En Boid 24 estamos muy preocupados por esta situación, razón por la que desde hace tiempo ofrecemos aconsejamos la instalación de descalcificadores de agua en las viviendas de nuestros clientes. Unos sistemas sencillos con los que poder obtener agua de calidad sin necesidad de cargar botellas, tener que hacer frente a averías provocadas por la acumulación de cal en bajantes o en tuberías de diferentes suministros, de acumular plásticos o de usarlos de manera masiva, y ahorrando notablemente en el consumo de agua. Descalcificador por ósmosis: qué son y para qué sirven Los descalicificadores son máquinas que filtran el agua y eliminan la presencia de calcio y magnesio de su composición. Se trata de sistemas domésticos, de pequeño tamaño y fácil instalación, que suelen ubicarse en la cocina, bajo el fregadero, que es donde se encuentra la entrada principal de agua en el hogar. Estos descalcificadores realizan sus funciones mediante ósmosis. Esta actividad suele desarrollarse en varios pasos en los que se produce un intercambio iónico de las sustancias. Estos pasos suelen completarse con una descalcificación y con una regeneración. Es decir, durante el proceso de intercambio iónico, el agua que entra –y que está repleta de cal y de magnesio- atraviesa una resina que atrapa todos los iones desprendidos por el calcio y el sodio. De manera que el agua resultante es de gran pureza y tiene un buen sabor. Si optamos por instalar uno de estos descalcificadores en nuestra vivienda obtendremos importantes ventajas como son las siguientes: 1. Evitan las concentraciones de cal en nuestros grifos y tuberías, lo que supone evitar la aparición de averías en este sentido y las incomodidades que ello conlleva cuando aparecen. Sobre todo, en lo que a corte de suministro se refiere. 2. Prolongamos la vida útil de nuestros electrodomésticos, ya que la cal que se acumula acaba afectando a la integridad de las piezas metálicas y las acaba estropeando, por lo que tenemos que desecharlo con mayor asiduidad de lo que quisiéramos. Lo que supone, de nuevo un gasto añadido al mantenimiento de nuestra propiedad. 3. Evitamos que las bajantes y las cañerías se obstruyan, algo que sucede habitualmente cuando hay cal en el agua, ya que se acumula en su interior produciendo tapones. Estas intervenciones de mantenimiento son muy costosas ya que hay que localizar las tuberías afectadas, abrir paredes, sustituirlas, volver a tapar y enlucir. Una factura que de nuevo repercute sobre los propietarios de las viviendas o las comunidades. 4. Evitamos tener que estar comprando habitualmente botellas de agua para beber o cocinar, lo que entraña además que estamos consumiendo más plástico del que deberíamos y, por extensión, no contribuimos a frenar el efecto invernadero ni el cambio climático. Todas estas ventajas son extrapolables a las comunidades de propietarios por lo que también es conveniente que se plantee su instalación a ese nivel, pues todos los vecinos del bloque salen beneficiados de esta medida. Así pues, si quieres ahorrar dinero, evitar tener que cargar con botellas y garrafas de agua constantemente, consumir masivamente plástico (con lo que ello supone de perjudicial para el medio ambiente), no lo dudes y hazte con un descalcificador por ósmosis en tu vivienda. Tu salud, el medio ambiente y tu economía te lo agradecerán más de lo que te imaginas. Y si tienes dudas sobre la manera en que instalarla o cuál es el mejor modelo del mercado, no lo dudes y consulta con Boid 24, te atenderemos encantados.
Mantenimiento de piscinas: No lo dejes para última hora
Una piscina requiere atención durante todo el año. Si bien es verdad que es durante el verano cuando más trabajo acarrea, lo cierto es que durante el invierno hay que vigilar el estado de sus elementos físicos y materiales para evitar cualquier desperfecto o rotura. No hay que esperar a la llegada del buen tiempo para arreglar cualquier imprevisto que haya podido suceder, o dar forma a cualquier elemento que pueda dificultar su puesta en marcha cuando el calor haga acto de presencia y queramos darnos un chapuzón. En Boid 24 somos expertos en el mantenimiento de piscinas, de ahí que siempre aconsejemos a nuestros clientes que presten atención a sus espacios acuáticos. Una alerta que debe ser constante y que debe prestar atención a determinados aspectos. Para que puedas seguir estas pautas hemos redactado el siguiente artículo en el que te orientamos sobre cómo debe desarrollarse en mantenimiento de una piscina, con idea de que no lo dejes para última hora. Mantenimiento de piscinas El mantenimiento de las piscinas es aquel conjunto de actividades que mantiene a esta instalación en perfectas condiciones. Tanto en lo que se refiere a su construcción como a la integridad del agua que en ella se almacena. Durante los meses en los que no se usa la piscina (especialmente las descubiertas) hay que emplear productos que nos ayuden a mantener el agua de la mejor manera posible. Esto es especialmente importante si la piscina no tiene cubierta o no tiene ningún sistema que proteja el agua del exterior. Para este tiempo, en BOID 24 aconsejamos el empleo de productos especiales que se añaden al agua de la piscina durante el invierno y alargan su vida, evitando que tengas que cambiarla o reponerla. Durante el invierno es el momento idóneo para realizar una limpieza de las superficies de la piscina que quedan al descubierto. Es decir, de aquellos elementos que quedan al vaciar la piscina o cuando el agua está baja de nivel. Para ello, lo mejor es utilizar un desincrustante. También es interesante emplear un abrillantador, que es ideal para poner al día aquellos elementos metálicos. Hay que prestar especial atención también a la limpieza de la línea de flotación que puede realizarse con ayuda de un desengrasante para que no nos cueste mucho esfuerzo si pasa mucho tiempo marcada en los azulejos o en sus paredes. Las partes exteriores están en contacto con el agua durante mucho tiempo, lo que facilita la aparición de hongos que pueden afectar a los pies de quienes entran y salen de la piscina descalzos. Para reducir este riesgo, lo mejor es tratar estas superficies con líquidos fungicidas que eviten su proliferación. Incluso durante el invierno, para que cale en los distintos materiales. Para el agua recuerda que hay que realizar las siguientes acciones: cloración (añadir al interior de la piscina un compuesto químico de cloro que actúa como oxidante de los elementos orgánicos que pueda haber en su agua); antialgas (si ya han aparecido debes insistir en este tratamiento singular del agua); lavado del filtro; sustancias floculantes para aquellas piscinas que cuenten con agua dura que den un aspecto blanquecino a su superficie; antical; y los productos que te permitan la regulación del PH; entre otros. En caso de que necesites ayuda para llevar a cabo el mantenimiento de tu piscina, tanto si es privada como si pertenece a una comunidad de propietarios, no lo dudes y contrata los servicios de Boid 24. Una manera inmejorable que adecuarse a la normativa y de sacar el máximo partido a tu piscina, incluso durante el invierno. Y todo ello contando con la ayuda de los profesionales de una empresa que lleva años trabajando en este sentido y con mucha experiencia en el sector.
Boid 24, una empresa con historia
Boid 24, llevan toda la vida haciendo más fácil el día a día de los valencianos y las valencianas. Tanto, que muchas personas que hoy son sus clientes ni siquiera habías nacido cuando comenzaron su andadura como empresa familiar.